Si tuviésemos que darle un calificativo a la agenda que lleva Xi Jinping al Décimo Noveno Congreso del Partido Comunista Chino (PCCh) es de ambiciosa. Ambiciosa porque aspira a conseguir que el PCCh le permita conformar un equipo de trabajo de su entera confianza dejando fuera de los cuadros de mando a representantes de otros grupos de interés.