El profesor Hendrik Bessembinder de Arizona State University y un grupo de colaboradores publicaron un papel de trabajo en 2019 titulado “ Do Global Stocks Outperform US Treasury Bills?”. Al estudiar el retorno compuesto de 62 mil acciones comunes a nivel global, en el periodo 1990-2018, encontraron que el 56% de las acciones estadounidenses y el 61% de las del resto del mundo tuvieron un desempeño inferior al de una letra del tesoro estadounidense con vencimiento a un mes.
La creación de valor neta del periodo para las empresas estadounidenses (resultado de las empresas ganadoras menos el de las perdedoras) fue de 44,7 billones de dólares y fue generado por el 1,3% de las compañías estudiadas.
__________________________________________________________________________________
Los primeros modelos sobre el comportamiento de los rendimientos de los títulos financieros suponían que estos seguían una distribución normal, sin embargo cuantiosas investigaciones han mostrado que aunque siguen una distribución acampanada, ésta está sesgada hacia la derecha, por lo que los retornos promedios tienden a estar sobreestimados.
Aunque mucho se ha estudiado sobre el comportamiento de los retornos de las acciones, las investigaciones se concentraban en el mercado de valores estadounidense, tal vez por la abundancia de datos recopilados sistemáticamente.
Afortunadamente, el profesor Hendrik Bessembinder de Arizona State University y un equipo de colaboradores decidieron estudiar el comportamiento de los retornos accionarios para un grupo de 62 mil acciones en los mercados accionarios de 42 países, confirmando el sesgo hacia la derecha de dichos retornos, y otros hechos relevantes que discutiremos en los siguientes párrafos.
El grupo de investigadores mencionados calculó los retornos mensuales compuestos, incluyendo dividendos, durante el periodo 1990-2018 de cada una de las empresas de la muestra, encontrando que un inversionista hipotético que hubiese comprado una acción, la hubiese mantenido durante el periodo de análisis, reinvirtiendo los dividendos en la misma compañía habría obtenido solamente, en el 40,5 por ciento de los casos, retornos superiores a los de una letra del tesoro estadounidense con vencimiento de un mes.
Cuando se divide la muestra en dos bloques uno de acciones estadounidense y otros de empresas del resto del mundo, el 43,7 por ciento de las empresas estadounidenses y el 39,3 por ciento de las del resto del mundo habían superado el retorno del instrumento de renta fija ya mencionado.
Cuando se modifica la estrategia de inversión para considerar la recompra de acciones y la reinversión de los dividendos en las acciones de nuevas compañías, tal como lo haría un inversionista institucional, se encontró que sólo en 39,1 por ciento de las acciones a nivel global excedían el rendimiento del instrumento de renta fija usado como referente.
Durante el periodo de análisis 43,7 billones de dólares de valor económico neto fue creado en mercado accionario estadounidense. ¿Cómo se compagina este resultado con el desempeño mediocre de la mayoría de las acciones?, pues simplemente por el hecho de que el desempeño extraordinario se concentró en un grupo muy reducido de compañías.
El 61,9 por ciento de las empresas de la muestra destruyó valor para sus accionistas por el orden de 21,83 billones de dólares. Es decir, que si solo se hubiese considerado la creación de valor de las empresas exitosas, llamada Creación de Valor Bruta (CVB) este habría sido del orden de 65,6 billones de dólares.
Las 881 compañías de mejor desempeño (1,33 por ciento de la muestra) generaron el equivalente al valor económico neto mencionado en el párrafo previo (43,7 billones) y cerca del 67,20 por ciento de la CVB.
Estos resultados favorecen la escogencia de estrategias de inversión pasivas, donde el inversionista compra un portafolio que replica un índice bursátil, siempre bajo el supuesto que este no tiene, a priori, la capacidad de distinguir las acciones de mejor desempeño del resto.
El alto grado de concentración del éxito económico en tan pocas empresas genera una gran pregunta para los estudiosos de los modelos de organización industrial: ¿Qué factores explican tal concentración?
Comentários